miércoles, 6 de julio de 2011

Se conocieron en el campeonato de España de Break Dance. Ella fue a un campeonato por primera vez, era cerca de su pueblo y sus amigos insistieron en que le acompañaran, que su alegría les daba fuerza y querían tener todas las cartas para ganar. Cuando entró se quedó embobada, este baile siempre le había fascinado, todos los chicos bailando, todos vestidos de adidas, aunque pocas chicas, una pena la verdad...
Minutos antes de empezar la competición un chico se acercó a hablar con sus amigos, se debían conocer de hace mucho porque fueron muchos los abrazos... cuando se giró y ella lo vio se quedó embobada con su sonrisa... ya sabéis, esa sonrisa de la que te enamoras la primera vez que la ves, pero que sabes que debes tener cuidado, risa de chico desvergonzado y sinvergüenza, rodeada de la barba de tres días tanto que le gustaba a ella, siguió la mirada por su piel, blanca, blanca, que parecía hielo,y subió a sus ojos, grandes, azules, mirada profunda, y el chico se dio la vuelta y dejó de verle. Pero ella quería más. Ella quería todo con él. Como siempre hacía, se había enamorado a primera vista, un poco tonto, si, pero ella era así, que se le iba a hacer, después le iba como siempre... pero eso es otra historia.
Comenzó el baile, y madre mía cuando bailó que no se perdió ni uno de sus movimientos, y cuando le quitaron en la semifinal gritó que era injusto de tal forma que todos acabaron riéndose, hasta ella una vez que se le pasó la vergüenza...
Sus amigos no ganaron, pero ella ganó algo más porque aquel chico de risa desvergonzada saldría con ellos en su pueblo, bueno él y otros muchos más. Ella salió con sus amigas pero en cuanto tuvo oportunidad se escapó al botellón de los "b-boys", necesitaba conocerle había pasado todo el día y no se había atrevido, no podía pasar de la noche. Y así una noche de diciembre la pasó en la calle esperando el momento oportuno, pero él no aparecía por ninguna parte... ya hasta se lo contó a sus amigos, en primer momento lo dijo como tontería ese chico será mío, pero como ella era así no le hicieron mucho caso, pensaron que esta noche ya le gustaría otro, pero no, así que sus amigos comenzaron a llamarle pero no cogía el móvil, no me lo quisieron decir pero yo ya pensaba que estaría con alguna otra...
Ya a las 6 de la mañana decidí irme a casa, me acompañaba un amigo que me había encontrado, harta de estar de pie esperando a que apareciera me quite los tacones, me recogí el pelo y me puse la chaqueta de mi amigo, así descalza y muy guapa como iba cuando cruzó la esquina y se lo encontró allí, solo, no había nadie cerca. Ella sorprendida tiro hacia delante, estaba hasta nerviosa, le hablo de él a su amigo, y él sabiendo como era ella no entendía que ya no estuviese allí con él, así que se armó de valor y fue a por él. Qué había perdido el móvil dijo... él le dejó el suyo y ella llamó y así salieron las palabras, ella le soltó todo, lo que le había gustado esta tarde, que sentía la necesidad de conocerle, y que parecía una loca pero no era así pero que necesitaba decírselo, y cuando por fin calló el comenzó a reír, ella miró hacia abajo, y en ese momento salió por la puerta de una casa una chica con un par de condones diciéndole "¡¡Ya tengo lo que queríamos!!" y ella dio media vuelta y cuando todavía no había dado dos pasos le escuchó: "¡¡Espera!! Lo siento Diana, tengo mejores cosas que hacer. Chica loca, te acompañó." Y así entre risas, tonterías y locuras comenzó una preciosa historia de amor, dura, difícil, pero de las más bonitas que pueden existir.